Que comience la partida

Una nueva entrega de la antología «Esto lo contamos entre todos», que surgió como una manera de dar voz al subconsciente de todos aquellos que, durante la cuarentena que comenzó el 15 de marzo de 2020, se prestaron a participar en este experimento.

El resultado de ese esfuerzo fue un compendio de cuarenta y cuatro variopintos relatos de diversos géneros —desde comedia o drama, hasta ciencia ficción, realismo mágico o terror—, que crecían y se imbricaban poco a poco, conectándose entre sí para formar un universo complejo y orgánico en torno a los conceptos de pandemia, cuarentena y encierro en sus sentidos más amplios, pero con la suficiente entidad propia como para ser intemporales.

 

La premisa «Vivir sin hacer ruido por miedo al fracaso», propuesta por @Ele.acosta era un indicativo del estado de ánimo por el que muchos estábamos pasando incluso antes de pandemia y que esta solo contribuyó a acentuar.

¿Y tú? ¿Sigues viviendo sin hacer ruido?

Que comience la partida

Podía contar con los dedos de una mano las veces que se había lanzado a la piscina, siempre comprobando antes que realmente hubiese agua. Nunca se arriesgó a dar un paso en falso, porque era más fácil gritarle al mundo, con una sonrisa en la cara, que en realidad no era tan importante; que en realidad no pasaba nada; que siempre habría otra oportunidad para quebrar su máscara de hierro.

Los días transcurrían en su diminuta cabina de edición, montando mil películas en cinemascope sin levantarse de la cama. A veces con sesión doble y palomitas. Se esforzaba cada día en ser el atrezo de una película de Coppola, perdido entre mil detalles recargados, brillando en un mar de lentejuelas para no destacar en absoluto.

Había construido un universo estático en un mundo que evolucionaba inclemente alrededor. Era su particular cápsula del tiempo, solo que el tiempo era imposible de parar. Eso se lo sabía de memoria. Y, sin embargo, luchaba a diario contra las agujas del reloj.

Harta estaba de escuchar aquello de que los únicos que fracasaban eran los que nunca lo habían intentado. Eso era una chorrada como un piano. Para ella no era una cuestión de éxito o fracaso, como si la vida fuese una campaña de marketing. A ella, lo que realmente le aterrorizaba, lo que le quitaba el sueño por las noches, era exponer al mundo la carne y el hueso que se escondían detrás de su coraza.

Sus dedos exploraban una y otra vez las infinitas cicatrices de su piel, prometiéndose que jamás volvería a entrar en batalla. Odiaba sentirse vulnerable, presa del miedo a que un día descubriesen que no tenía ni puta idea de las reglas de aquella estúpida partida de ajedrez. Por eso permanecía muy quieta en una esquina del tablero.

El problema es que solamente basta un paso para que comience la partida y poco importa que queramos o no participar.

¿Por qué no elegir blancas o negras y ser la primera en iniciar el movimiento?

Un relato de Fernando D. Umpiérrez

A partir de la premisa de @Ele.acosta:
«Vivir sin hacer ruido por miedo al fracaso».

Banda Sonora Opcional: The Sound of Silence – Silvia Pérez Cruz

«Esto lo contamos entre todos». © Todos los derechos reservados.

Publicado por Fernando D. Umpiérrez

Guionista, escritor, superviviente y tan biólogo como médico el Gran Wyoming. Un soñador empedernido encerrado en el cuerpo de un pragmático redomado. Observador impasible de realidades alternativas. Ahora sobrevivo como guionista de fortuna. Si buscas alguna historia y no la encuentras, quizás puedas contratarme...